Ángel quiere pasar un fin de semana en Madrid con sus padres, su hermano Jesús y su novia Eugenia. Él tiene que buscar alojamiento para todos, para eso llama por télefono a un hotel de la ciudad.
RECEPCIONISTA: Hotel “El Sol”, buenos días. ¿En qué puedo ayudarle?
ÁNGEL: Buenos días, quería reservar tres habitaciones para el viernes y el sábado de la próxima semana.
RECEPCIONISTA: ¿Qué tipo de habitaciones desea? ¿Individuales o dobles?
ÁNGEL: Necesito dos habitaciones dobles con cama de matrimonio para mis padres y mi novia. Tambén necesito una habitación individual para mi hermano. Las habitaciones tienen cuarto de baño, ¿verdad?
RECEPCIONISTA: Sí, no se preocupe. Todas las habitaciones tienen cuarto de baño y aire acondicionado. ¿Quiere alojamiento y desayuno, media pensión o pensión completa?
ÁNGEL: Quiero sólo alojamiento y desayuno, porque vamos a hacer turismo y comeremos fuera del hotel.
RECEPCIONISTA: Perfecto. El precio de la habitación individual es de 100 € y de las habitaciones dobles 150 € cada una. ¿A nombre de quién pongo la reserva, por favor?